"La vida útil de una habilidad técnica está disminuyendo rápidamente. Si en la década de 1970 eran 20 años, hoy son solo 2,5 años".
Las cinco razones de nuestro por qué:
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¡El sector digital busca talento! Según el Banco Mundial, la economía digital global representó en el año 2016, 11,5 billones de dólares o el 15,5% del producto interno bruto (PIB) mundial, y esta cifra debería llegar al 25% para el año 2026.
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La educación tecnológica es muy precaria: solo el 50% de los países africanos incluyen habilidades informáticas en su plan de estudios, en comparación con el 85% en otros lugares. (Fuente: Banco Mundial). .
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Son las mujeres jóvenes quienes están siendo más afectadas por la falta de educación y acceso al mercado laboral.
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La epidemia de Covid-19 ha complicado la situación: la tasa de desempleo de las mujeres está aumentando en todos los países con ingresos bajos y medios.
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¡La educación no trabaja las competencias transversales! Sin embargo, son fundamentales para facilitar la adaptación y adquisición de nuevas habilidades técnicas, ya que éstas últimas se hacen obsoletas rápidamente. (2,5 años de media, actualmente, según la OCDE).
Según la OCDE
EN 2035 se necesitarán habilidades tecnológicas para el 85-90% de los trabajos.
El 70% de los puestos de trabajo que tendrán demanda en el 2035 aún no existen.
La rápida transformación de las telecomunicaciones y el advenimiento de las tecnologías digitales durante los últimos veinticinco (25) años han tenido un impacto tremendo en todas las sociedades.
A partir de ahora, es importante garantizar la adecuada apropiación de las herramientas digitales por parte de los más jóvenes y en particular de las mujeres. Es fundamental ayudarles a adquirir habilidades que faciliten el uso seguro, crítico y creativo de la tecnología digital para mejorar las condiciones de aprendizaje, acceder a mejores y más diversas oportunidades laborales, tener una mayor variedad de actividades de ocio y, al final, mejorar la propia inclusión y participación en la sociedad.
También es muy importante fortalecer las habilidades digitales transversales (las famosas “habilidades blandas”) que serán activos indispensables en términos de flexibilidad y adaptabilidad para su vida laboral: “La vida útil de una habilidad técnica se está reduciendo rápidamente. La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) predice que se reducirá a un año en 2025 ". Este es el final del reinado de las "duras habilidades" (habilidades técnicas), porque tendrán que renovarse constantemente. ¡Ya no es posible confiar en nuestros logros! .